Tras el Foro Social Urbano, las sensaciones tampoco fueron nada buenas. Por un lado se critica la mala organización y la falta de espacios para las organizaciones del tercer sector y la sociedad civil. Demasiada importancia a los inversores, muchos de ellos africanos, muy bien vestidos, a los que los miembros de UN-habitat les abrieron las puertas de par en par. La crisis que algunos estamos viviendo no sirve para aprender, sino que para irse a otros países a reproducir el modelo capitalista, provechoso para ambas partes pero desgraciado para el pueblo. Por otro lado, UN-habitat no tiene un centavo (Joan Clos, ex-alcalde de Barcelona, es el presidente, algo que fue acordado por Zapatero a cambio de un dinero que España no ha dado -y que dudo que lo haga), y ya no financia proyectos, cierra acuerdos con empresas privadas. (por cierto, un articulo que me mandó Edu, http://publ.hegoa.efaber.net/publications/260)
Además, centrándonos en Europa, aquí las organizaciones que luchan por la dignificación del habitat están lejos de estar altamente establecidas y desarrolladas, y es un problema. Ahora mismo las ciudades sólo puedes degenerar, ir a peor, y no parece que una solución vaya a venir por el camino convencioal.
Dejo un link de una de las organizaciones internacionales más metidas en estos temas, donde en América Latina tiene fuerza,
salut!